TENDENCIA EN MORTALIDAD POR CÁNCER DE MAMA
JA. Álvarez-Riesgo*, A. Cueto Espinar
Consejería de Servicios Sociales; Universidad de Oviedo
c/General Elorza 32. 33001 Oviedo. Tfno: 985.10.65.17. joseanar @princast.es
Antecedentes y objetivos: Las tasas de incidencia de cáncer de mama muestran un crecimiento sostenido en las últimas décadas, constituyendo la primera causa de muerte en mujeres españolas por procesos neoplásicos. Aunque la divergencia entre incidencia y mortalidad parece aumentar, debido en parte al diagnóstico precoz (incluyendo la mamografía), mejoras tecnológicas, sistemas de registro, etc, la mortalidad también crece. La puesta en marcha de programas de cribado de cáncer de mama de base comunitaria en los últimos años, entre los que se encuentra Asturias, requiere un conocimiento del patrón de la mortalidad por esta causa, constituyendo éste el objeto de la presente investigación a través de un modelo edad-período-cohorte.
Métodos: Hemos estudiado las tasas de mortalidad por cáncer de mama en Asturias entre 1975 y 1994, a partir de las estadísticas oficiales. Se ha empleado la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) en sus octava y novena revisión (CIE-8,CIE-9), incluyendo el código 174.0. Las poblaciones a riesgo se han calculado por interpolación entre las estadísticas demográficas oficiales, censo y padrón municipal respectivamente. Las tasas se ajustaron con la población europea. Hemos empleado un modelo loglinear con el fin de estudiar los efectos edad, período y cohorte, categorizándose en quinquenios los grupos de edad, el período del estudio y las cohortes. Dada la dependencia lineal entre los tres factores hemos ajustado modelos edad-período y edad cohorte, independientes. El análisis estadístico se realizó con Egret.
Resultados: La tasa ajustada de mortalidad creció un 1,37% anual en el período de estudio. las tasas específicas aumentaron en los sucesivos períodos calendarios. Los modelos muestran un claro efecto de la edad (p <0.001), del período (p <0.001) y de la cohorte (p<0.001), estos dos últimos ajustado previamente el efecto de la edad. La mortalidad en el período 1990-1994 se incremento un 43% con relación al período de referencia (1975-1979). El ajuste de ambos modelos pone en evidencia un mayor efecto cohorte. La cohorte 1945-1949 presenta un riesgo relativo de muerte de 3,44 con relación a la cohorte de referencia (1895-1899).
Conclusiones: Los componentes de los modelos edad-período-cohorte tienen significado biológico diferente en el proceso multietapa de la cancerogénesis. El efecto edad refleja la mayoría de los cambios del proceso biológico. El efecto período está relacionado con factores ambientales (promotor), siendo el más probable la sobrealimentación en edades medias, con obesidad perimenopáusica, e incremento en la formación de hormonas endógenas, principalmente estrógenos, modelo alimenticio reproducido en nuestra población. El efecto cohorte representaría la expresión de distintos factores hormonales y reproductores (edad de la menarquia, edad del primer nacimiento, número de embarazos, etc.), estado nutricional, etc., actuando sobre estadios tempranos del desarrollo neoplásico (iniciador). En nuestro medio las tasas de fecundidad han caído de manera espectacular desde 1975, con un índice sintético de fecundidad de 0,8 hijos/mujer (1995), a la par que se ha retrasado notablemente la edad del primer embarazo.