ENSAYO CLÍNICO SOBRE LA EFICIENCIA DE UN PERFIL ANALÍTICO ESTÁNDAR VERSUS UNA ANALÍTICA NO ESTÁNDAR EN EL INGRESO EN UN SERVICIO DE MI
A. Yáñez*, M. Pladevall, P. Rosique, A. Casas, J. Prat, F. Alonso, J. Brugués.
Hospital General de Vic
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Antecedentes y objetivos: La utilización eficiente del laboratorio es un tema de interés creciente tanto en el ámbito clínico como en el del propio laboratorio. Diferentes trabajos muestran que la demanda excesiva de pruebas de laboratorio se podría situar actualmente entre un 20% y un 90%. El objetivo de este estudio es determinar la eficiencia de una intervención para racionalizar la demanda de pruebas de laboratorio en la primera solicitud analítica programada de un paciente ingresado en un servicio de Medicina Interna (MI).
Métodos: Ensayo clínico aleatorizado. La unidad de estudio ha sido la primera analítica programada realizada a pacientes ingresados en el servicio de M.I. De forma aleatoria y mediante un programa informático la mitad de los peticionarios de la primera analítica se asignaban al grupo control y la otra mitad al grupo intervención. En el peticionario control (PC) figuraban marcadas 21 determinaciones analíticas correspondientes a un perfil estándar definido según las determinaciones que se solicitaban durante los 6 meses previos al inicio del estudio). El peticionario intervención (PI) no presentaba ninguna determinación analítica marcada y las pruebas se seleccionaban en función de la clínica del paciente. El laboratorio también realizaba la analítica estándar en este grupo pero habitualmente sólo se informaba de los parámetros solicitados.
Resultados: Durante un período de 10 meses se realizaron 1.638 ingresos de M.I. y se incluyeron 1.110 primeras analíticas programadas (555 en cada grupo). Los criterios de exclusión fueron: paciente programado, estancia <2 días y traslado interno. Los principales GDRs se distribuyeron de forma similar entre los dos grupos y la estancia media en cada grupo era comparable (PC=9,4 i PI=9,6). Se ha observado una diferencia significativa en el número de pruebas demandadas en la primera analítica ordinaria (media PC=22,6 y PI=17,3 p<0,0001, U de Mann-Whitney). No se han producido diferencias significativas en el número de analíticas sucesivas demandadas ni en el número de pruebas por analítica sucesiva (media de pruebas sucesivas PC=7,6 y PI=7,1). En el grupo intervención, mediante la analítica estándar, se detectó un hallazgo asintomático que permitió realizar un nuevo diagnóstico. Diariamente se encuentran parámetros fuera de la normalidad sin relevancia clínica. Se ha estimado que realizar 43 analíticas estándars representa un coste de material fungible de laboratorio adicional de 20.000 pts. (5.200.000 pts. en las 1.110 analíticas del estudio) si se compara con solicitar estas analíticas en función de la clínica del paciente.
Conclusiones: Solicitar las pruebas de laboratorio en función de la clínica del paciente reduce el número de pruebas totales del ingreso ya que reduce el número de pruebas de esta primera analítica y no modifica el de las siguientes.