CONSUMO PASIVO DE TABACO EN LA POBLACIÓN JUVENIL MADRILEÑA
C.M. Meseguer*, I. Galán, C. Febrel, J.L. Cantero, A. Gandarillas, C.M. León, B. Zorrilla.
Servicio de Epidemiología. Consejería de Sanidad y Servicios Sociales,
Comunidad de Madrid.
C/O´Donnell 52, 2º planta. CP:28009 Madrid. Tfno: 91.586.72.60
Objetivo: Establecer el patrón de consumo pasivo de tabaco en la población juvenil escolarizada entre 15 y 18 años de edad del municipio de Madrid.
Metodología: Estudio transversal basado en una muestra representativa de la población escolarizada en 3º,4º de ESO, 1º y 2º bachillerato, COU y cursos equivalentes, de los centros de titularidad pública y privada del municipio de Madrid. Se utiliza un muestreo de conglomerados bietápico, seleccionando 8 centros, 25 aulas, y un total de 577 alumnos. Se realiza una entrevista personal en el centro escolar, y el trabajo de campo se realiza en los meses de enero y febrero de 1999. Se define como no fumador a los adolescentes que refieren no fumar nunca, y se valora en este colectivo los siguientes indicadores: consumo habitual de tabaco de las personas que conviven en casa; proporción de jóvenes no fumadores expuestos al tabaco en el hogar en las últimas 24 horas, o en bares/discotecas u otro recinto cerrado cargado de humo en el mismo período de tiempo. Se llevó a cabo la prueba ji-cuadrado, para determinar si existían diferencias significativas en la distribución según género y edad. El error estándar del estimador se ha calculado, teniendo en cuenta el efecto de diseño del muestreo de conglomerados.
Resultados: La prevalencia de no fumadores entre los entrevistados es de un 55,3% ± 6,5. El 51,1% ± 6,2 de ellos, han estado expuestos al humo de tabaco de forma pasiva en algún momento en las últimas 24 horas, siendo la mediana de exposición de 2 horas. El lugar donde se produce la mayor exposición, es en el propio hogar, con un 39,8% ± 5,2 de no fumadores expuestos y una mediana de 2 horas. Esta exposición es tan elevada, debido a que el 53% ± 4,1 convive con al menos una persona fumadora y el 23,5% ± 3,3 con más de una. Un 9,4% ± 6,7 estuvo expuesto en las últimas 24 horas en bares o discotecas, y el 14,1% ± 5,3 en otro tipo de recinto cerrado cargado de humo de tabaco. No se observan diferencias estadísticamente significativas entre la exposición pasiva al tabaco según el género o la edad.
Conclusiones: La mitad de los adolescentes entrevistados no fumadores están expuestos pasivamente al humo de tabaco, alrededor de 2 horas al día, fundamentalmente en su propio hogar. Esta exposición podría ser evitada, y marca una interesante línea de intervención en las actividades de prevención frente al tabaquismo.