SISTEMA DE ALERTA EPIDEMIOLÓGICA EN GALICIA
J.L. Aboal*, X. Hervada. L. Abraira, M. del Valle, J. Suanzes, R. Martinez-Risco, A. Armada, P. Fraga, F. Yañez, S Fernández
Dirección Xeral de Saúde Pública. Xunta de Galicia
José Luis Aboal. Dirección Xeral de Saúde Pública. Subdirección de información y gestión en salud pública. Camiño Francés 10. 15701 Santiago de Compostela.
Tfno.: 981-542941. E-mail: dxsp2@jet.es
Antecedentes: El sistema de alerta epidemiológica de Galicia (SAEG) surge, en 1996, para posibilitar la notificación urgente, en cualquier momento del día todos los días de la semana, de problemas de interés epidemiológico y asegurar una respuesta inmediata ante ella. El objetivo de este trabajo es describir el SAEG y realizar una valoración de su funcionamiento en horario fuera de oficina.
Métodos: El SAEG se diseñó para remplazar cualquier otra forma de notificación urgente, teniendo en cuenta la obligatoriedad de la notificación de determinados procesos en los que las actividades de vigilancia epidemiológicas deben ser rápidas, enfermedades de declaración obligatoria y brotes. Se valoró la carga de trabajo que suponía y la fuente, tipo y frecuencia de las notificaciones.
Resultados: El SAEG está integrado por: 1) Los declarantes, médicos en ejercicio, centros sanitarios y el 061 2) Vía de notificación telefónica 3) Los receptores, durante el horario de oficina son las secciones provinciales de epidemiología y fuera del horario de oficina el epidemiólogo de guardia (EG), único responsable para toda la Comunidad. Ante una notificación fuera del horario de oficina el EG valorará la situación y decidirá la actuación más adecuada, iniciar las intervenciones necesarias, con otras unidades de salud pública siempre que sea preciso, o diferirlas hasta el día siguiente en que se realizará la comunicación del proceso a la delegación provincial. La figura del EG se constituye, de forma voluntaria, entre los epidemiólogos de las delegaciones provinciales y de los servicios centrales. El tiempo de guardia se distribuye, por semanas, proporcionalmente entre los epidemiólogos. La retribución del tiempo de guardia se realiza en concepto de disponibilidad horaria. Entre mayo de 1996 y diciembre de 1998 el SAEG recibió a través del EG 239 avisos. Diferenciando entre notificaciones y consultas observamos que un 60% corresponden a notificaciones, casos de enfermedad meningocócica en un 54,5% y toxiinfección alimentaria en 31,4%, el resto tiene relación con alertas alimentarias, reacciones adversas a vacunas. Del 40% que representaron las consultas, el 44% se relacionaron con la enfermedad meningocócica, otras consultas frecuentes se relacionaron con mordeduras, enfermedades importadas y problemas relacionados con medio-ambiente. El 061 realizó el mayor número de avisos, directamente o como intermediario de los médicos o de particulares. El epidemiólogo de guardia sólo tuvo que intervenir personalmente en dos circunstancias relacionadas con consumo de alimento, siendo la carga de trabajo perfectamente asumible (media de 2 avisos por semana).
Conclusiones: Consideramos que el diseño del SAEG ha resultado efectivo y la carga de trabajo que supone la cantidad y tipo de avisos son asumibles por un único EG. La rapidez en la respuesta ha mejorado el prestigio de la vigilancia epidemiológica tanto ante los declarantes y particulares como ante los órganos superiores y la prensa.