CÁNCER DE ENCÉFALO Y USOS DEL SUELO EN NAVARRA Y PAÍS VASCO
G. López-Abente*, M. Pollán, M Ruiz, J Almazán, M. Errezola, E. Ardanaz.
Centro Nacional de Epidemiología, Instituto de Salud Carlos III; Instituto de Salud Pública de Navarra; Dirección de Ordenación y Evaluación Sanitaria, Gobierno Vasco.
Servicio de Epidemiología del Cáncer. Centro Nacional de Epidemiología. Sinesio Delgado nº 6, 28029 Madrid. Tel.: 91-3877802. Fax: 91-3877815.
E-mail: glabente@isciii.es.
Antecedentes y Objetivo: Navarra y el País Vasco presentan las tasas de mortalidad por cáncer de encéfalo más altas de España. Este trabajo pretende estudiar la relación entre los patrones de distribución municipal de la incidencia por cáncer de encéfalo y los usos del suelo clasificados mediante teledetección.
Métodos: Se han recuperado todos los casos nuevos de cáncer de encéfalo (CIE: 191) en los registros de tumores de población de Navarra y País Vasco entre 1986-1993. Las poblaciones municipales por grupos de edad y sexo utilizadas han sido las del censo de 1991. Para el estudio de los patrones geográficos, se han calculado los Razones de Incidencia Estandarizadas tomando como referencia la incidencia por edad y sexo de ambas comunidades autónomas. La clasificación de los usos del suelo se obtuvo del proyecto CORINE-LANDCOVER, que clasifica la superficie terrestre a partir de imágenes obtenidas por satélite. Estas imágenes fueron procesadas para obtener las hectáreas que cada municipio dedica a 23 tipos diferentes de usos del suelo. Se ha efectuado un análisis preliminar mediante modelos de Poisson para comprobar la posible influencia de estas variables en el patrón geográfico de la incidencia de este tumor.
Resultados: Se han contabilizado 1.481 casos distribuidos en los 512 municipios. La tasa de incidencia global ajustada por edad es de 10,03 y 6,95 por 100.000 en hombres y mujeres respectivamente. En los modelos, las variables porcentajes de suelo urbano (RR 1,22 IC 95% 1,02-1.47), cultivos de secano (RR 1,23 IC 95% 1,05-1,43) y cultivos de regadío podrían mostrar asociación con la distribución de la incidencia de cáncer de encéfalo. Por el contrario, los municipios con mayor superficie de bosque mixto presentan menor riesgo (RR 0,79 IC 95% 0,68-0,93).
Conclusiones: Los resultados justifican la profundización en el estudio de los tipos de cultivo, su tratamiento fitosanitario y su relación con el cáncer de encéfalo.