La atención de media y larga estancia es un sector cada vez más importante de la prestación de cuidados sanitarios. La utilización de sistemas de clasificación de pacientes se contempla cada vez más como un elemento necesario tanto en la planificación como en la gestión de servicios en el sector de atención a enfermos crónicos y geriátricos.
Aunque mucho menos conocidos, los sistemas de clasificación de pacientes han tenido en el sector de la atención de media y larga estancia un desarrollo mucho más rico y precoz que en el sector hospitalario. De este modo, puede verse la evolución desde clasificaciones basadas exclusivamente en la valoración de la capacidad funcional de los residentes, hacia clasificaciones que incluyen progresivamente variables de complejidad asistencial, hasta sistemas elaborados como la clasificación RUG-III.
Los sistemas de clasificación de pacientes se utilizaron inicialmente como instrumentos para soportar los sistemas de financiación de los centros de media y larga estancia basándose en las características de paciente. Posteriormente, sus aplicaciones se han ido extendiendo hacia otros objetivos relacionados con la gestión de los centros, la evaluación de la calidad asistencial, la determinación de niveles de dotación de personal, el control del acceso a la atención y la formulación de políticas gubernamentales. En España, la única experiencia de utilización de un sistema de clasificación de pacientes es la del Programa Vida Als Anys en Cataluña, que desde 1990 utiliza una clasificación para la financiación de los centros acogidos al mismo.
The importance of long term care sector is increasingly growing. Actually, the use of patient classification systems is a useful tool for the planning and management of health services for chronic and geriatric patients.
Despite being much less known, patient classification systems have had a richer and earlier development in the long term care sector than in the acute care sector. Thus, one could see the evolution from classifications based on the assessment of functional dependency to classifications progressively including variables corresponding to clinical complexity, and finally to complex systems such as RUG-III.
Patient classification systems were first utilised as tools for the financing of long term centres, based on the patients' characteristics. Later, their applications have spread out to objectives related to the management of centres, assessment of quality of care, staff allocation level, control of access and national policies. In Spain, the only experience in the use of a patient classification system is the one used by the Catalan Health Care Administration which uses a classification for the financing of their centres.