Como parte de un estudio multicéntrico propuesto por la OMS para determinar la prevalencia de infección por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) entre los usuarios de drogas por vía parenteral (UDVP) de Madrid, identificar características sociales y de uso de drogas asociadas a la seropositividad e identificar los factores asociados a conductas de bajo riesgo, tales como no compartir jeringuillas y usar preservativo, se entrevistaron 472 UDVP, 240 reclutados en la calle y 232 en centros de tratamiento para drogodependientes. Para comparar proporciones se utilizó el test de X2 y para estimar las odds ratios de cada factor de riesgo, se ajustó un modelo de regresión logística.
La prevalencia de infección por el VIH entre los UDVP estudiados en Madrid fue del 50% (53% entre los reclutados en la calle y 38% entre los reclutados en centros de tratamiento para drogodependientes). El 45% de los entrevistados seguían compartiendo jeringuillas. De los 315 individuos con algún contacto sexual en los últimos seis meses, sólo el 22% usaba preservativo, siempre o casi siempre, en sus relaciones.
A la vista de los resultados, se deduce que habría que ampliar las intervenciones tendentes a incidir en el cambio hacia hábitos saludables, presentando alternativas tales como servicios de intercambio de jeringuillas y de mantenimiento con metadona, e introducir de un modo claro y contundente el consejo pre y post prueba del VIH, en todas aquellas agencias en contacto con esta población.
As part of a multicenter WHO study on HIV infection among drug injectors, 472 intravenous drug users (IDUs) were interviewed, 240 recruited in the streets and 232 at drug treatment centers. The objectives of the study were to assess the prevalence of HIV infection among IDUs of Madrid, to identify factors associated with risk reduction behaviors, such as the use of sterile syringes and condoms. Chi-square and logistic regression were used to test for differences and to estimate odds ratios.
Prevalence of HIV infection among IDUs in Madrid was 50% (53% among those recruited in the street and 38% among those recruited at treatment centers). Forty five per cent of those interviewed were still sharing syringes. Out of the 315 sexually active subjects, only 22% reported using condoms always or almost always.
These results suggest that a range of interventions should be implemented to promote change towards healthier behaviors, including syringe-exchange programs, methadone maintenance treatments and pre and post-test counseling in those agencies which care for this population.
Este proyecto ha contado con la financiación del FIS mediante la ayuda 90E 1258.